The same (sort of) but in English

martes, 24 de marzo de 2020

Corona



No necesita traducción ni contexto: corona. Aquí tampoco hablamos ya de otra cosa. Corona en el noticiero, corona por teléfono, corona pegado en las paredes, corona en los chistes, corona en el miedo, corona cada vez más cerca. Está todo en las manos (bien lavadas) de dios. Eso es lo que dicen aquí. 

Gel antibacterial, sana distancia, conspiración, confinamiento. Dudas. Nadie parece saber muy bien qué hacer, todos miran al rededor, preguntan, sugieren, critican, copian, memorizan las últimas estadísticas. Yo ni para eso soy buena. Desde hace mucho me suena a muchísimos, con más o menos ceros entre infectados y muertos locales o globales. 

Aunque muchas veces no la digo, de vez en cuando sí tengo una opinión más o menos formada de lo que tocaba hacer, de si se hizo bien, de qué creo que se hizo mal, o por lo menos de preguntas que necesitaría responderme. Ahora no tengo nada. Yo ya no sé qué medidas son demasiado radicales y cuáles adecuadas debido a lo dramático y volátil de la situación. Tengo miedo, y un 'panicómetro' instalado con un amigo, que hace que la cifra salga siempre un poquito más baja nada más porque me hace reír. 

Más que enfermarme yo, me asusta la incertidumbre de lo que va a pasar, la idea de que enfermen personas a las que quiero, la idea de que el virus entre al campo de refugiados y tantos otros sitios donde no tienen cómo defenderse, los negocios en quiebra, lo que viene.  

Me da la sensación de que algo se hizo muy mal desde el principio, hay algo llevaba ya mucho tiempo roto. A ver si logramos usar esta crisis para encontrar las grietas y empezar a sanarlas.     

No hay comentarios.:

Publicar un comentario